Apariciones en "Noche de los búhos: Los espejos vienen en todos los tamaños"[]
Personajes principales
- Catwoman
Personajes secundarios
- Spark
- Penguin
Villanos
- Court of Owls
- Talon (Ephraim Newhouse) (Primera aparición)
Localización
Objetos
- Dagas de Aves
- Látigo de Catwoman
- Paraguas de Penguin
- Bati-Señal
Sinopsis de "Noche de los búhos: Los espejos vienen en todos los tamaños"[]
En Gotham en 1665, el Talon de aquella época, Ephraim Newhouse, es un asesino que lucha con honor y se niega a matar a objetivos desarmados. El hombre le entrega a su última víctima una daga para que luche por su vida pero este hombre sale huyendo dando gritos, lo que alarma a unos soldados quienes acuden al lugar y Ephraim debe asesinarlos a todos. La Court of Owls está harta de este comportamiento por lo que ponen a dormir al Talon.
En la actualidad, la Court of Owls despierta a todos sus Talons y a Ephraim se le da como objetivo a Penguin.
Catwoman y Spark vigilan la guarida de Penguin esperando que salga para robar la Daga de Ave que les hace falta. Al lugar llega el Talon y asesina a los guardias de Penguin pero cuando está a punto de matar a su objetivo nota que este tiene la Daga de Ave, estas armas le pertenecieron cuando fue el Talon principal de la Court. Toda la situación es vista por Catwoman, Spark le dice que se vayan pues no es asunto de ellos pero la mujer decide intervenir y luchar contra el asesino ya que no puede ignorar lo ocurrido. En conjunto, Catwoman y Spark pelean contra Ephraim descubriendo que este no puede morir. El ladrón es atrapado por el asesino quien está a punto de acabar con su vida, Catwoman le propone que si deja vivo a su compañero ella le entregará las otras cuatro dagas. Penguin aprovecha la conversación para disparar con su paraguas a la cabeza del Talon, noqueándolo. Además, le dice a Catwoman que desde ahora él le debe un favor por haber salvado su vida.
Catwoman decide dejar el cuerpo de Ephraim junto a la Bati-señal para que Batman lo encuentre. Y también deja con él las cinco dagas, al ver lo preciadas que eran para él.